Con sus primeros refuerzos de cara al Clausura 2016, Santos Laguna regresó a los trabajos en el TSM, donde inició su pretemporada con la intención de figurar de nuevo en los primeros planos.
Y es que divididos en grupos, tras gozar de su periodo vacacional, los Guerreros a temprana hora del domingo, se pusieron a las órdenes del área de Ciencias Aplicadas al Deporte para llevar a cabo diferentes actividades, entre ellas mediciones antropométricas, exámenes posturales y pruebas de carácter físico.
Ulises Dávila, Diego de Buen y el argentino naturalizado mexicano Martín Bravo, se enfocaron en una evaluación médico-deportiva y electrocardiograma, contando con la supervisión de los Servicios Médicos del club.