Peyton Manning logra su segundo trofeo de campeonato, no dice si se retira.
Apoyados en una defensiva que dominó a placer, los Broncos de Denver consiguieron el tercer campeonato de su historia al vencer 24-10 a Panthers de Carolina en el Super Bowl 50, que puede ser el último encuentro en la carrera de Peyton Manning.
Los Broncos hicieron valer la frase de que “las defensas ganan campeonatos”, al conseguir siete capturas sobre el elusivo Cam Newton y lograron su primer cetro desde el 31 de enero de 1999.
Manning ganó el segundo campeonato de su historia, pero estuvo lejos de una jornada memorable. Terminó con 13 pases completos de los 23 que intentó para 141 yardas y una intercepción.
El más viejoPeyton se convirtió en el quarterback más viejo en ganar un Super Bowl (39 años), y el primero en toda la historia en conseguir campeonatos con múltiples equipos, pero el resultado de este domingo se lo debe a una férrea defensiva que perfectamente podría tener en cada jugador a un MVP.
DefensaLa defensiva del entrenador Wade Phillips fue un monstruo capaz de detener al fenómeno Cam Newton. Los 11 jugadores dentro del campo no dejaron de acosar al quarterback de Panthers, cuyo único brillo se limitó al que tuvo durante el calentamiento en unas zapatillas doradas que por reglamento de la NFL no pudo usar en el partido.
Los muchachos de Phillips no sólo limitaron en puntos a una de las ofensivas más versátiles en cuanto a selección de jugadas y su elaboración, también se dieron tiempo para aportar unidades para su equipo, que no fue duro a la ofensiva.
A partir de la noche de este domingo, la defensa de los Broncos puede convivir perfectamente e ir de la mano con la de los Bears de Chicago de 1985.
La unidad fue capaz de forzar cuatro intercambios de balón, tres de ellos balones sueltos y una intercepción. No por nada fueron la mejor de toda la NFL.
Apagado“Superman” nunca pudo despegar para surcar los cielos como algunos de los 40 MVP de Super Bowl que estuvieron ayer en el Levi’s Stadium. Newton sumó 265 yardas y una intercepción.
Carolina tuvo una oportunidad más al ataque de hacer, por lo menos, más decoroso el marcador, pero la defensa volvió a sofocar a un Newton que lució frustrado.
Manning, desde la banda, lucía una imborrable sonrisa. No era para menos.